Una vez más, la ruta que conecta el municipio de Trinidad, en el departamento del Beni, con la ciudad de Santa Cruz, se encuentra bloqueada.
Esta es la primera manifestación de este tipo en el 2025, sumándose a más de 20 bloqueos registrados durante el año anterior.
Desde el lunes, interculturales, sectores sociales y productores de San Julián y sus comunidades reactivaron el bloqueo de la carretera, exigiendo soluciones inmediatas a una serie de demandas que afectan la vida cotidiana de los pobladores.
La medida, según los manifestantes, será indefinida hasta que el Gobierno central responda adecuadamente a sus exigencias.
El bloqueo, que comenzó en la mañana del lunes, fue suspendido temporalmente en horas de la tarde debido a las lluvias, lo que permitió la apertura de un espacio para el diálogo.
En este encuentro, que se llevó a cabo en la ciudad de Santa Cruz con la presencia de representantes del Gobierno y de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), no se alcanzó ningún acuerdo.
Ante la falta de avances, los manifestantes decidieron reactivar el corte de la vía cerca de las 19:00, dificultando aún más el paso de los usuarios.
Entre las principales demandas de los sectores movilizados se encuentran la provisión de combustible, la construcción de obras esenciales y la reducción de los precios de la canasta familiar.
Además, exigen respuestas a un pliego petitorio que incluye 21 puntos específicos, algunos de los cuales son de carácter urgente para la población de la región.
Una de las principales preocupaciones de los bloqueadores es el desabastecimiento de combustible en el municipio de San Julián.
Solicitan el cumplimiento de los cupos de diésel y gasolina asignados a los surtidores locales, así como la fiscalización del mercado para evitar que los revendedores se beneficien a costa de los productores.
Además, piden la construcción de importantes infraestructuras como el hospital de segundo nivel y el alcantarillado sanitario en San Julián, así como la reactivación de la planta aceitera inaugurada en diciembre de 2024.
La situación también ha afectado el transporte interdepartamental. Las autoridades de Tránsito suspendieron la salida de buses desde la Terminal Bimodal hacia Trinidad para evitar complicaciones en el recorrido, pero algunos agentes de transporte decidieron seguir vendiendo pasajes, incrementando el costo del boleto debido a los desvíos que deben tomar los vehículos para evitar la zona de conflicto.
El precio del pasaje ha subido de 70 a 80 bolivianos a 120 y 130 bolivianos debido al uso de rutas alternas, lo que generó malestar entre los usuarios que deben trasladarse de un departamento al otro.
Los manifestantes dejaron claro que no levantarán el bloqueo hasta recibir respuestas concretas del Gobierno.
De no ser atendidos, advierten con radicalizar las medidas de presión, lo que podría agravar aún más la situación en la región.